Rom 8:1-8

“Pues lo que la ley no pudo hacer, ya que era débil por causa de la carne, Dios lo hizo: enviando a su propio Hijo en semejanza de carne de pecado y como ofrenda por el pecado, condenó al pecado en la carne,”

¿Qué significa eso para mi? Varias cosas: 1) Dios lo hizo, parte de Él, su justicia debía cumplirse pero también su misericordia por el hombre. Su plan siempre fue un hombre santo como Él es Santo. 2) La ley no pudo santificar al hombre, pero ahora en Cristo se daba esa posibilidad. 3) El poder de el pecado original había sido derrotado en la cruz. La pregunta es, ahora que voy a hacer con todo esto?

¿Cómo puedo poner en práctica hoy mi meditación en la Palabra? Vivir bajo el gobierno del Espíritu cada minuto de mi vida, cada hora, cada día, cada semana. Cristo ya hizo todo lo necesario.