Romanos 13:8-14

“El amor no hace mal al prójimo; por tanto, el amor es el cumplimiento de la ley.”

¿Qué significa eso para mi? Jesús explicó con una parábola llamada “el buen samaritano” quien era mi prójimo y suena bastante sencillo decir que el prójimo empieza por aquellos que tengo en casa conmigo, mi esposa e hijos; por lo tanto al meditar en lo que significa que “el amor no hace mal al prójimo” lo puedo traducir en no tratar mal a mi esposa e hijos. Obvio el círculo de prójimos no es solo mi familia, pero empieza con ellos.

¿Cómo puedo poner en práctica hoy mi meditación en la Palabra? El llamado hoy es claro: practicar el amor de hechos (el amor práctico) primero con los de mi casa y después con los demás.